Por: Ernesto Ma
Nosotros como dominicanos, estamos compelidos a escudriñar los anales de nuestra historia, porque del conocimiento de la misma dependerá nuestra identidad nacional y, por consiguiente, la defensa de nuestro territorio y soberanía. Por esta y otras razones, nos atrevemos a contar bien la historia mal contada. A principio del siglo XVII, específicamente entre los años 1605-1606, el entonces gobernador de la isla de Santo Domingo, General Antonio Osorio recibe del rey Felipe III de España, la real cédula en donde se le ordenaba despoblar, es decir, trasladar para el territorio oriental, las comunidades del norte y el oeste dela isla, específicamente, Bayajá, Yaguana, Montecristi y Puerto Plata, por los supuestos contrabandos que los agricultores y comerciantes criollos de esas zonas realizaban con mercaderes franceses, vendiendo sus productos a mejores precios, en detrimento de la Real Casa de Contratación de Sevilla como organismo regulador del comercio entre España y su colonia. La ejecución del traslado de los habitantes de las citadas comunidades se convirtió en una odisea para el gobernador Osorio y sus tropas, pues los moradores le opusieron resistencia por las razones entendibles de tener que abandonar susviviendas, predios agrícolas y ganados. Esta situación obligó al emisario de la Corona a tomar la indeseable decisión de incendiar las casas y las posesiones agrícolas de los pobladores, y trasladarlos de manera compulsiva hacia la parte oriental de la isla en donde se les asignó nuevas porciones de tierras cuyos poblados recibieron los combinados nombres de: Bayaguana, en donde habitan los antiguos moradores de Bayajá y Yaguana y Monte Plata, en donde moran los traídos desde Montecristi y Puerto Plata.
La debilidad económica de la Corona Española fue la causa fundamental para que sus tropas acantonadas en la zona más alejada de la ciudad de Santo Domingo no pudieran recibir las provisiones necesarias para su sustento y, por consiguiente, no pudieran ejercer las labores de custodia de las exportaciones delos productos de las zonas norte y oeste de la isla.
A partir de las devastaciones de 1605-1606, todo el territorio despoblado en las zonas norte y oeste de la isla quedó a merced de los piratas, principalmente de los bucaneros franceses que moraban en la Tortuga, una isla adyacente de la Hispaniola. Estos piratas se dedicaban al robo de buques enemigosamparados en sus patentes de corso. Su nombre lo reciben por la forma de ahumar en el horno (bucán) que utilizaban para cocer las carnes de las reses y los cerdos que cazaban. Cuenta la historia, que un día salió de la Tortuga un pequeño grupo de bucaneros hacia tierra firme para cazar algunas reses, y es cuando se enteran del abandono o despoblación de la zona oeste de la Hispaniola, y deciden tomarla en posesión, iniciando de esta manera, un cambio radical en la administración de la parte occidental y en la geopolítica de la isla. De hecho, los nuevos pobladores de la parte occidental habían iniciado el desventurado proceso de división política de la isla en dos colonias.
Los bucaneros de la Tortuga cambiaron su estilo de vida nómada de los mares para convertirse en sedentarios hacendados y productores de diversos rubros agrícolas entre los cuales, destacaba el cultivo de la caña de azúcar: “El oro dulce de la colonia” Según afirma Isabel Allende, en su obra de carácter histórico: “La Isla bajo el mar”.
Cabe destacar, que los franceses asentados en la parte occidental de la isla no realizaban las labores agrícolas con sus propias manos, pues se auxiliaron de la mano de obra de los africanos traídos a nuestra isla de forma ilegal en calidad de esclavos. Estos esclavos realizaban trabajos de bestias, eran maltratados y vivían en barracas en estado de hacinamiento; esta situación incentivaba la fuga de los mismos hacia las zonas montañosas y esto provocaba cuantiosas pérdidas en las plantaciones.
Los franceses de manera inteligente tomaron la decisión de importar desde las costas africanas, manos de obra femenina, con el propósito de emparentarlas con los varones esclavos y de esta manera erradicar o disminuir las constantes fugas. Pero, los amos no previeron que la figura escultural de las negras africanas los deslumbraría, haciéndoles sucumbir ante sus naturales encantos.
La unión de los amos blancos con las esclavas negras trajo como resultado, el nacimiento de una criatura que no era blanca ni negra, sino un híbrido denominado: mulato y que más adelante usted sabrá de quien se trata.
En fecha 20 de septiembre de 1697 se firma entre España y Francia, el primer intento de división fronteriza de la parte oriental y occidental de la Hispaniola, mediante el Tratado de Ryswick con el propósito de evitar las hostilidades entre los habitantes de ambas zonas; pero dicho acuerdo de paz no fue suficiente y continuaron las hostilidades entre los pobladores de ambos lados.
Durante el siglo XVIII, la parte occidental de la isla alcanzó un exponencial desarrollo en la producción y exportación agrícolahacia distintos destinos europeos, logrando convertirse en la colonia más próspera de América.
El historiador dominicano, Fernando Pérez Memén, en su obra: “La Iglesia y el Estado en Santo Domingo (1700-1853)”, establece que en Saint Domingue para el año 1783 había 783 ingenios y trapiches, 3,150 plantaciones de añil, 3,117 plantaciones de café, 798 de algodón y 182 destilerías de ron y su población era de 525 mil habitantes.
Finalmente, los esclavos de las plantaciones cañeras de occidente iniciaron su proceso de liberación con un ritual vudúen el monte Caimán como antesala a la revolución de 1791, y posterior grito de independencia de los descendientes de franceses y africanos el 1 de enero de 1804.
Los descendientes de españoles, africanos y en menor proporción de los taínos, es decir, los dominicanos, habitaron la isla de Santo Domingo, antes que cualquier otro pueblo, ya que, a la llegada de los conquistadores ibéricos en 1492, quienes habitaban esta isla eran los aborígenes, llámense: Taínos, Ciguayos o Caribes y con la llegada de los esclavos africanos para las labores agrícolas y ganaderas, se inició el proceso de cruzamiento genético entre los amos y los esclavos; trayendo como resultado, el nacimiento del pueblo dominicano. Entonces,habiendo leído la verdadera historia acerca del origen de ambos pueblos, sea usted el jurado.
Comentarios
Publicar un comentario
Comenta y aporta utilizando las reglas del respeto y la dignidad.