Un asesino que se fugó de la cárcel y pasó 22 años oculto en la selva se entrega para pedir su libertad.

Un hombre que se fugó de prisión hace 22 años tras haber sido condenado por el asesinato de su pareja se entregó a las autoridades argentinas para solicitar su libertad, recogen medios locales.

El fugitivo fue identificado como Ramón Ángel Abregú, que en enero del 2000 mató a tiros a su pareja embarazada, Eva Azulina Falcón, dentro de una clínica de la ciudad de Río Grande, en la provincia argentina de Tierra del Fuego.

Abregú fue detenido y condenado a 20 años de cárcel ocho meses después de haber cometido el crimen. No obstante, en febrero de 2001 logró escapar del centro penitenciario donde estaba cumpliendo su condena, y desde ese momento se mantuvo prófugo.

Exige su libertad

Abregú, quien actualmente tiene 70 años, se presentó este martes junto con su abogado en el Tribunal de Juicio en lo Criminal de Río Grande para solicitar su libertad debido a la "prescripción del caso". 

"El plazo de prescripción son 20 años, que es el tiempo en que logró mantenerse prófugo viviendo en la clandestinidad", indicó el abogado, Alejandro De la Riva, que argumentó que su cliente "cumplió la pena de esa manera".

Asimismo, dijo que el homicida "se mantuvo oculto en el norte argentino", añadiendo que este logró ingresar a Tierra del Fuego "de manera furtiva" y sin llevar documentos personales, y que el regreso implicó el cruce de cuatro pasos fronterizos (dos argentinos y dos chilenos).

Según medios locales, el fugitivo permaneció escondido en la selva de la región del Chaco salteño. Abregú fue trasladado a una cárcel distrital mientras los jueces del Tribunal de Juicio en lo Criminal, que años atrás habían ordenado su captura, evalúan el pedido de excarcelación presentado por su abogado.

Yván Ariel Gómez Rubio: artículo tomado de RT.