En
mi escrito de hoy, me adentro un poco en el sector educativo que en
los últimos años ha experimentado considerables avances jurídicos
que ponen un freno hacia las tomas de decisiones con muchos de sus
empleados, esta consideración la emito porque para nadie es un
secreto que el año dos mil cuando ascendió a la presidencia el Ing.
Hipólito Mejía,
se realizaron una series de acciones que lesionaron la
institucionalidad, es posible que en una mínima cantidad de líderes
del Partido ganador tengan en sus mentes las mismas intenciones, sin
embargo es bueno decirles con tiempo, el contexto no es el mismo,
partiendo del propio ascenso de Luis
Abinader,
quien con sectores fuertes de la clase media y alta asumió un
compromiso firme de cambio y transformación del país, y esto debe
comenzar por el respeto a las leyes existentes y completar las que
faltan.
El
caso que nos adentra hoy al debate educativo está referido a los
cargos que están en la comidilla de atracción de los seguidores del
partido que asumirá el poder a partir del 16 de agosto del 2020, nos
referimos a las Direcciones Regionales, Distritales y Técnicas
docentes de ambas dependencias.
El
primer caso que tocaremos es el referido a las Direcciones Regionales
y de Distritos Educativos, estos puestos están consignados en La ley
general de Educación 66-97, como órganos administrativos regional y
local del Ministerio de Educación, los mismos en el año 2017, se
vieron fuertemente impactados en su proceso de selección por medio
del reforzamiento jurídico establecido por el Consejo Nacional de
Educación a través de la Ordenanza 24-2017, que instituyó un
PROCESO COMPETITIVO, en pocas palabras un concurso de competencias
profesionales, de perfil académico, ético, psicológico y laboral
por la relevancia que amerita un puesto así dentro del sistema
educativo, todo esto en consonancia con la Ley 41-08 de
Administración Pública y el Reglamento del Estatuto Docente, así
como también otras normativas del sistema jurídico dominicano y que
forman a su vez del refuerzo social contemplado en el Pacto Educativo
firmado por todas las fuerzas vivas del país en el año 2014.
Esta
organización jurídica que aportó el Consejo Nacional de Educación
no quitó la prerrogativa que tiene por ley el Ministro de Educación,
sino más bien le brindó una oportunidad de seleccionar el servidor
público educativo con las características más idóneas para el
puesto en cuestión.
Esta
iniciativa chocó con sectores educativos que desde el año 1997
cuando se creó la Ley General de Educación habían utilizado esta
discrecionalidad a su manera, sin abrir espacio a las competencias
profesionales dentro de los docentes del país, fue por esa razón
que crearon una situación mediática en la opinión pública,
satanizando al ministro de turno sin contemplación. Cuando esto no
les resultó, entonces acudieron al Tribunal Superior Administrativo
y al Tribunal Constitucional, en ambos espacios se demostró de
manera jurídica lo correcto de la aplicación de la Ley 66-97 y la
Ordenanza 24-2017.
Esta
realidad Jurídica es la que encuentra el Partido del Cambio, el PRM,
quien designará como Ministro de Educación a un maestro veterano y
conocedor del sistema, quien tiene la carga encima de calmar esa sed
incesante por esos cargos educativos, esto para respetar la ley,
sabiendo que en su frente carga la marca auténtica del CAMBIO
proclamado en la contienda electoral, porque fue el jefe de campaña
del hoy presidente la República Dominicana Luís Abinader.
Es
ese tenor, que no sería algo lógico ni prudente que teniendo Luis
Abinader, grandes retos económicos, educativos, sanitarios y
anticorrupción estatal, que de manera ligera su mano derecha como lo
es el recién anunciado Ministro de Educación Dr. Roberto Furcal, le
pueda crear una crisis en el área educativa que toque fondos
jurídicos, social y hasta gremial. Es de entender entonces que sus
dirigentes deben contener la espera de un corto tiempo para que
concluya la gestión educativa de los que fueron seleccionados por
medio de la ordenanza ya mencionada.
El
Ministro de Educación entrante tiene el reto de propiciar un
ambiente de trabajo colectivo, armonioso e institucional entre ambos
sectores, sin dejar a un lado el fortalecimiento de su partido y a la
vez del sistema educativo en general bajo el marco jurídico
establecido.
El
segundo tema de este análisis jurídico está relacionado a los
cargos de técnicos docentes distritales y regionales. Es normal que
en campaña electoral dominicana se prometa todo, y ese es el caso de
estos puestos de técnicos docentes. El ascenso al puesto de técnicos
docentes está jurídicamente reglamentado por el artículo 139 de La
ley 66-97 que rige el sistema educativo, bien sabemos que no se ha
realizado ningún concurso para el ingreso de técnicos docentes
desde el año 1997, porque los mismos lideres educativos que han
gobernado el sistema habían violentado las normas, para seleccionar
sus allegados, muchas veces sin los mínimos méritos profesionales,
morales y de competencias, con sus excepciones, negándole con esta
práctica corrupta la oportunidad a miles de maestros capacitados del
país.
Esta
brecha mal sana e ilegal tuvo un impacto en el año 2014, con la
firma del Pacto Educativo en donde las fuerzas sociales, políticas y
educativas plasmaron bajo firma que todo ingreso a la carrera docente
debía ser producto de un concurso de oposición como manda LA LEY DE
EDUCACION, esto abarcó a todos: docentes, directores y técnicos
docentes. Es esa la razón de peso, que partir del año 2014, los
ministros de turnos no han nombrado a nadie en los distritos y
regionales en la categoría de técnico docente.
Esta
norma jurídica en el sistema educativo es también una camisa de
fuerza para el recién designado Ministro de Educación quien tendrá
que enfrentarse atender las miles de promesas que hicieron los
líderes locales en las provincias referentes a estos ascensos al
magisterio nacional de su corriente. La sensatez se impondrá en el
nuevo ministro de educación y lo que procede es organizar un llamado
a concurso abierto para técnicos docentes distritales y regionales,
y así, no nadar en contra de su partido, ni mucho menos de las leyes
educativas del sistema que él dirigirá, cosa esta que podría ser
un mal precedente.
Informativo
Brisas del Sur
Yván
Ariel Gómez Rubio.
Fuente:
Constitución
de la República.
Ley
General de Educación.
Sentencia
del Tribunal Superior Administrativo
Sentencia
del Tc
Reglamentos
y ordenanzas.
Las leyes son pedazos de papeles en este país, sólo se cumplen cuando a los altos funcionarios les conviene de lo contrario hacen lo que les da la gana.
ResponderEliminarCiertamente que su artículo no tiene desperdicio, está en consonancia con la verdad porque tiene una base legal que lo sustenta; sin embargo, es bueno recordar que también está establecido una evaluación anual de la gestión, lo cuál certifica los la calidad en materia de educación. Ello favorece que donde se está trabajando bien, pues se mantenga el personal que está garantizando ésos avances.
ResponderEliminarDe todos modos dejaré unas interrogantes sólo para fines de análisis sobre el único y último concurso para Directores Regionales y Distritales, muy buen proceso por cierto.
Porqué a pesar de que pasaron muchos colegas, sólo seleccionaron en la totalidad de la Regionales y Distritos educativos a quienes respondían a la línea política del PLD?
Porqué algunos que presentaron cartas de recomendación de dirigentes políticos fueron elegidos, aún sacando calificación más baja que otros colegas?
Buena noche: Inventar una razón del porqué suceden las cosas, esto debe tener lógica y sobre todos un buen uso en el manejo.
ResponderEliminarResulta que ahora si tiene uno que estar sujetado a la ley, pero el actual gobierno, se negó a que haya un verdadero concurso para los puestos y designar los mejores postulantes, en cambio sólo se hizo el show con los concursantes que no eran del gobierno, ya qué, nunca se buscó la calidad; sinó el compañerito(a)
Sucede que así la equidad no existe.
Ahora deben irse del puesto sin derecho a la justificación, debido esto aque no hubo tal concurso y si lo hubo que señalen donde hay uno que no sea un cuadro político del PLD.
Ahora E pa' fuera que van.